Se declaró Patrimonio Histórico Departamental al ejemplar Pinus Pinea ubicado en Calle Tres Acequias

El Honorable Concejo Deliberante de Rivadavia declaró Patrimonio Histórico Departamental al ejemplar Pinus Pinea ubicado en Calle Tres Acequias entre las numeraciones 2440 y 2460 casi Buenos Vecinos del Distrito de Medrano.

El árbol en cuestión posee una antigüedad superior a 124 años, convirtiéndose en un ejemplar de notable longevidad y un símbolo perdurable del patrimonio natural del Distrito de Medrano. Su existencia durante más de un siglo otorga al árbol un valor histórico, ecológico y cultural singular.

El mismo, fue plantado por la familia Correas, una de las familias pioneras en el asentamiento y desarrollo del Distrito de Medrano. Corina Correas, hija de Segundo Correas, se casó con Agenor Espínola y heredó la propiedad conocida como Finca Espínola, donde se encuentra el árbol. Forma parte de una trinchera original de pinos y magnolias que delimitaba el acceso a la Finca Espínola desde lo que hoy es Calle Agenor Espínola hasta la entrada del Foyer de Charité. Esta trinchera, constituida por árboles de fecha anterior a 1900, no solo embellecía la entrada a la finca, sino que también servía como un elemento significativo del paisaje histórico de la región.

En 1915, Corina Correas de Espínola, demostrando su compromiso con la comunidad, donó una hectárea de terreno para la construcción de la Iglesia de Medrano. Las arboledas, incluido el árbol de Pinus Pinea, ya existían en el terreno donado, añadiendo un valor simbólico adicional a la contribución de la familia a la vida comunitaria y religiosa del distrito.

En 1925, el área fue sometida a un loteo, y todos los árboles existentes, incluido el Pinus Pinea, permanecieron dentro de la Finca Espínola. La antigüedad de estos árboles, junto con su supervivencia en el mismo lugar durante más de un siglo, resalta su relevancia como testigos de la evolución histórica y urbanística de la zona.

La protección del arbolado es esencial para mantener la biodiversidad, el equilibrio ecológico y el patrimonio histórico en áreas urbanas. Los árboles centenarios como el Pinus Pinea contribuyen al bienestar ambiental y estético de la comunidad, proporcionando sombra, reduciendo la contaminación del aire y funcionando como elementos de identidad cultural y local.

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